Cuando jóvenes en el colegio secundario, sabíamos que los días de pileta no llegaban a quince durante todo el verano, por cuanto siempre nos sobraban algunos del abono de quince baños, pero además sabíamos que después del quince de febrero, salvo excepciones ya no teníamos días de pileta.
Las principales piletas eran las del Hotel Punilla, Hotel El Parque y Hotel Los Pinos, con el negro Ponce como bañero y el Bebe Sleck como profesor de natación, y otras menos concurridas, cuya construcción izo caer en desuso los balnearios Municipal y Morecabo, que habían funcionado rebosante de turistas durante muchos años, era tiempo de las fotos pintadas que los dos fotógrafos de Ferrer se encargaban de tomar a lo veraneantes.
Hoy el balneario Siete Cascadas
El verano está mal datado, el 21 de diciembre es el medio del verano con el solsticio de verano, a partir de dicha fecha los días se acortan y se alargan las noches a razón de un minuto por día.
Por tanto, prepararse, pronto entramos en el otoño, que de acuerdo a la posición de la tierra con respecto al Sol, será el cinco de febrero, que coincide con el ingreso de la primavera en el hemisferio norte, esto permite entender la celebración del año nuevo chino.
El año nuevo chino cae en el día de la luna nueva más próximo al día equidistante entre el solsticio de invierno (冬至，Dōng zhì, entre el 21 y el 23 de diciembre) y el equinoccio de primavera (春分，Chūn fēn, entre el 20 y el 21 de marzo) del hemisferio norte. Ese día equidistante entre esas dos fechas cae entre el 3 y el 5 de febrero, en una fecha que está aproximadamente 45 días después de la del solsticio de invierno, y 45 días antes de la del equinoccio de primavera
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