Claro no estamos en Egipto, sino en la ciudad de La Falda, con poca similitud con El Cairo, donde nunca se entronizaron faraones, ni tumbas con momias, pero con capacidad para disfrutar de esta grandiosa imagen tomada desde el río Nilo, con la ciudad en el primer plano, la silueta de la pirámide de Gisa en el segundo y el Sol en el poniente a punto de esconderse.
Las sepultura la realizaban los egipcios al oeste del río donde se hundía el Sol, de ello se deduce que la desembocadura se encuentra hacia el frente.
Tal vez cuando comprendamos la simbología de las pirámides construyamos la propia en la Panpa de Olaen al oeste de la ciudad, plus ultra el río Pinto, y si entonces no tenemos un faraón para sepultar importemos alguno de La Rioja.
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