De la misma manera que el reloj Cu Cu, fuera construido inspirado en el de la ciudad de Carlos Paz, a partir de la movilización de algunos miembros de la colectividad alemana, y la donación de la máquina por el señor Clapier propietario de una relojería en la calle Paraná, hoy Meirovich.
El Festival del tango se inspiró como contrapartida del de folclore de la ciudad de Cosquin, con una comisión de vecinos que se encargaron de la correspondiente organización.
Los primeros festivales se realizaron durante el período de nuestro colegio secundario, en los primeros años de los años sesenta, en el auditorio municipal con techo de chapas que se lo llevó un tornado, reconstruido se produjo un bis de tornado y nuevamente quedo sin techo, el tercero es el actual.
Cada evento de Eolo, llevaba consigo la interrupción.
Todas las orquestas en algún momento participaron del festival, salvo Juan D'arienzo, quien nunca vino, tal decían, no quería salir de Buenos Aires.
Los estudiantes del Colegio Nacional de La Falda, hacíamos de acomodadores, lo que nos permitió conocer a las principales orquestas y cantantes de ese tiempo, y ver tras el escenario al glosador haciendo repiquetear la maquina de escribir así como los ríos de whisky consumidos por unos y otros.
Así pudimos contemplar como Pichuco Troilo se dormía sobre el "fueye" mientra tocaba con su orquesta.
Recientemente, antes de partir de Argentina, Putin intentó emular a Troilo-
